Hablemos de contar sillas.

Si es cuestión de contar, contaré un cuento entre miradas.
Ese que se ve de lejos mientras el corazón late fuerte, y evito que nos miremos.

Pero, te advierto, que no tiene final feliz. Que aquí la princesa no consigue al principe, y que el principe, suele suspirar por princesas que se creen reinas, simple y llanamente, porque saben que te vienen pequeñas.

Este cuento va de otra cosa.

De risas que ves pasar entre manecillas. De adivinar conversaciones. De pensar en qué y quién es más y menos y de querer ser lo que nunca se ha sido, tan sólo por ser quien te guste a ti.Quién les guste a ellos.

Si es cuestión de contar, también se contar hasta 10. De hecho más de una vez he tenido que aumentar el número, antes de que nos enfadasemos.. Otras-más muchas que pocas- me perdía en el 5 entre risas y volvía a empezar un rato después de que me olvidara de porque contaba.

Si es cuestión de contar,y como tu bien sabes, nunca supe contar mentiras, y preferí decirme la verdad antes que sumergirme en mi mentira, y hacer de un grano una montaña, tan sólo por no decir nada.

Si es cuestión de contar, puedes contarmelo todo. Eso lo sabes de sobra.Y después de hablar en silencio, como solemos hacer, procuro hacerte reir, simple y llanamente por costumbre.
Por eso, y porque sé que te gusta.

Y tu, gran conocedor del mundo de Gema, sabes que me gusta que rias. Y te dejas llevar, enseñando algún que otro diente, que a ambos nos encanta ver.

Porque si es cuestión de contar,sabes que simplemente SIEMPRE puedes contar conmigo.


Gema.